INMERSION LINGÜÏSTICA

Adiós a las becas

Mari Luz Jiménez Amaya

Correo electrónico

Leo con sorpresa e indignación en el Periódico Extremadura la anulación de la oferta de plazas de la Junta para alumnos de Bachillerato y Formación Profesional de estancias formativas estivales en Irlanda y Reino Unido. Mi hija mayor, hoy ya universitaria, obtuvo hace dos años una de estas becas para pasar tres semanas en Inglaterra; fue una experiencia sumamente enriquecedora a todos los niveles: lingüístico, cultural, social- Hoy, dos años después un programa de inmersión lingüística que se anunciaba a bombo y platillo hasta el 2015 se suprime de un plumazo cuando estaba destinado a los mejores alumnos de Extremadura. Este año, mi hijo, estudiante de 1º de Bachillerato, quería optar a una de estas becas, y posiblemente la hubiera conseguido; pero ya no hay opción. Señores, por favor, todos somos conscientes de la grave crisis que atravesamos, pero no podemos olvidar que el pilar de nuestra sociedad es la educación. Todo lo que en ella se invierta siempre será un valor seguro. Olvidémonos de no sé cuántos ordenadores por aula (por cierto, apenas se utilizan), de portátiles e invirtamos en nuestros jóvenes y su formación integral, idiomas incluidos, porque en ellos está no solo el futuro, también el presente. ¡Ah, una puntualización! Solo se puede optar a una beca de inglés del Ministerio si se ha sido becario en el curso 2010-2011 y el plazo acabó el 30 de marzo, si no, o lo pagas de tu bolsillo (cosa que pocos pueden permitirse) o te quedas en tu casa.

¿QUE ESTA PASANDO?

Indiferencia antela caída de un anciano

Rosa Sánchez Mandado

Mérida

Hace unos días se cayó a plomo un anciano al lado de mi casa. Estaba con los quehaceres de la comida y fue mi hijo quien me alertó de que oía gritos. Salimos y nos encontramos solo a una chica descompuesta y al señor con su cayado sangrando profusamente boca abajo en el suelo. Los del 112 acudieron rápidamente. En principio rotura del hombro, boca y dientes. Lo que me indigna y avergüenza es que nos dijeron que habían pasado personas y se habían limitado a mirar ¿qué hay en esos corazones, en esas cabezas?, ¿miedo, apatía, qué mierda hay?

Para quien tenga algo de humanidad. Involucrarse, estrechar la mano de quien lo necesita, no contagiar aposta. Aportar empatía, fortaleza, humanidad, ¡que estamos aquí cuatro días! ¡que somos todos iguales!, y muy importante, que un día puede ser vuestro padre, madre, hijo o vosotros mismos los que necesitéis una mano generosa tendida y ¡afortunados si la encontráis, al paso que vamos!

¡Ah, y no pongan caras de horror ante las desgracias que nos ofrecen día a día los telediarios! Las tienen a su lado, de todo tipo, claro que esas no proporcionan mucho e incomodan.

INMIGRANTES NORTEAFRICANOS

Una buena oportunidad

Patxi Aznar Bellido

Correo electrónico

Las revoluciones surgidas en el norte de Africa, están dejando un gran número de desplazados. De momento parece que la vieja Europa está gestionando el tema como siempre, es decir a quien le toque soportar la tragedia humanitaria que se las arregle. En el caso que nos ocupa es Italia la que está soportando lo insoportable, una avalancha masiva de emigrantes que ningún país europeo quiere.

Para España, que en más de una ocasión ha tenido que soportar en solitario las avalanchas de personas procedentes de Africa, sería una formidable ocasión para que junto a otros países mediterráneos intentase concienciar a los países del norte de Europa de la importancia que tiene este fenómeno, y así de esta manera, plantarle cara entre todos. Además en el caso del Estado español sería bueno tener en cuenta que cuando nos ha tocado emigrar a la Europa más norteña por distintas causas: guerra, búsqueda de trabajo, etcétera, se nos ha admitido.

Fomentar la solidaridad entre países es muy positivo para generar confianzas. Si a cualquier país solo se le apoya por distintos intereses, casos Egipto, Marruecos, Túnez, etcétera, luego pasa lo que pasa, y es que cuando las fuerzas internacionales intervienen en cualquier país de estos, pongamos el caso de Libia, surgen muchas desconfianzas, pues poco antes de comenzar la contienda entre leales al coronel Gadafi y rebeldes, estos países civilizados que ahora ayudan a los rebeldes tenían excelentes relaciones con dicho coronel.