El Ayuntamiento ha hecho balance de su campaña ´Cáceres limpia , que inició en octubre del 2007, hace casi año y medio. Destaca de ella el número de bolsas para recoger las heces de los perros: nada menos que 400.000 al mes. El concejal del área, Miguel López, cree que uno de los factores que invitan a pensar que cada vez hay más personas que utilizan las bolsas para el fin para el cual están destinadas es que cuando empezó la campaña las bolsas consumidas eran 100.000 al mes y ahora, como se ve, se han cuadruplicado.

Los resultados son alentadores y se aprecian con solo pasear la ciudad: cada vez es más habitual ver cómo el dueño de un perro deja limpio el lugar en el que el animal ha defecado. Sin embargo, la campaña debería tener un límite: el consistorio ha enseñado el camino, que hay que limpiar lo que ensucian los perros, y ha puesto a disposición lo necesario, las bolsas para hacerlo, pero no se puede olvidar de que limpiar las heces de los perros es una obligación ciudadana, que tendrían que llevar a cabo los dueños de los animales por el hecho de vivir en comunidad, no porque el ayuntamiento proporcione las bolsas. Es decir, hay que ser limpios como deber cívico, no porque los gastos los pague el erario público.