WRwepostar la gasolina más común, la de 95 octanos, ya está cerca del euro por litro. Si es gasóleo, el precio ya supera los 90 céntimos. Desde principios de año, uno y otro carburante han aumentado 15 y 10 céntimos respectivamente. Según los expertos, el precio del petróleo y sus principales derivados, como los carburantes de automoción, se mantendrá en niveles altos durante meses. La principal razón es que la demanda mundial no se detiene aunque suba el precio del barril, porque la extracción en los países productores, muchos con inestabilidad política, no puede seguir aumentando. También se sabe que las grandes refinerías, instaladas en países desarrollados, están al límite de su capacidad.

En este contexto, en España reaparecen las carencias de siempre. Somos un país muy vulnerable ante las variaciones de precios energéticos, sobre todo porque usamos demasiado fuel para generar electricidad cuando no la sirven las centrales hidroeléctricas. Sin renunciar a la exigencia de responsabilidades en los apagones, hay que abordar la cuestión de fondo: con el barril de petróleo rondando los 55-60 dólares, España está obligada a una revisión profunda de toda su política energética.