Periodista

No bebas a lo tonto, bebe comprometido", ha sido la voz de salida de un refresco que, a la vista de presiones y agresiones, ha puesto de los nervios al imperio y a uno de sus buques insignia: la Coca-Cola. El refresco, creado por un francés de origen tunecino, se llama Mecca Cola, tiene diseños de envases y gráficos parecidos a Coca-Cola y su mayor diferencia reside en que el 10% del precio se dedica a ayudar a los palestinos. Las expectativas de consumo de Mecca Cola han superado con creces las previsiones.

En una sociedad en la que resulta difícil la protesta eficaz, en la que los gobiernos se aprestan a la guerra sin tener en cuenta la opinión de sus ciudadanos, el fenómeno Mecca Cola puede acabar en bomba..., refrescante.