El casco histórico cacereño está formado mayoritariamente por templos, palacios y casas señoriales, que dan lugar a una de las ciudadelas renacentistas más completas del mundo. A día de hoy, e incluyendo la próxima apertura de los Golfines de Abajo, es posible cruzar el umbral de veinticinco palacios o casas solariegas, y visitarlas total o parcialmente. Un filón que la administración debe seguir ampliando.