TSteis meses se cumplen de los gravísimos atentados del 11-M en Madrid. Es el momento del recuerdo, de la reflexión y del examen del comportamiento con las víctimas. Me ha dejado estupefacto la denuncia de la presidenta de la Asociación de Víctimas del 11-M, Clara Escribano, de que la atención sanitaria de la Comunidad de Madrid con los afectados está siendo muy deficiente, hasta el extremo de que los sitúan en las listas generales de espera. Me rebelo ante la palabrería que luego no viene acompañada de hechos. Menos palabras, menos propaganda y más acciones coherentes es lo mínimo que podemos ofrecer a estas pobres gentes que sufrieron en sus carnes los odios y los errores de otros, sin tener la menor culpa de nada.

Cuando he visto el atentado contra la embajada de Australia en Yakarta, me he percatado de que es un calco de nuestro 11-M en todos los sentidos. Por eso me complace que Zapatero haya instado a los Ejércitos ocupantes de Irak para que retiren de allí también sus tropas.

Australia es uno de los países que enviaron un contingente a Irak semejante al español. Allí hay elecciones dentro de un mes y el partido de la oposición había prometido la retirada si ganaba las elecciones. ¿Les suena todo eso?.

*Periodista