WPweriódicamente aparecen análisis que indican que las tasas de abandono y fracaso escolar en Extremadura se encuentran entre las más altas de España. Este diario publicó ayer el último. Se trata de un informe oficial, el que elabora el Instituto Nacional de Evaluación y Calidad del Sistema Educativo (Inecse), dependiente del Ministerio de Educación. Ese informe describe severamente la situación de la educación en Extremadura: siete de cada diez escolares no logran terminar la Secundaria; y casi la mitad de los alumnos ya lleva retraso al llegar a 4º curso de la ESO... Extremadura, en abandono escolar, sí se encuentra entre las primeras autonomías: sólo la superan Baleares y Andalucía, además de Ceuta y Melilla. El fracaso de los jóvenes en su escolarización es un fracaso social sin paliativos porque, como también señala el informe, se trata de un hecho que puede marcar el devenir de la vida de un joven: el paro entre los que no se titulan en Secundaria es de casi el 40%, mientras que entre los que tienen estudios superiores, el desempleo es cuatro veces menor. En Extremadura ha habido un debate educativo en el que el fracaso escolar se ha interpretado como un factor más del problema, cuando ya hay muchos estudios que lo sitúan en otra dimensión: no es un problema, es el problema .