Soy un ciudadano que me gusta disfrutar, bien paseando o sentado en algún banco de nuestros parques y en este caso al que más suelo ir con mi familia es al parque del Príncipe. Cualquier ciudadano puede observar que la mayoría de la gente que va con perros los llevan sueltos, perros que sus características de raza, peso y volumen están catalogados como muy peligrosos, pero lo más curioso de todo esto es que hay un solo guarda para todo este gran parque. Este señor les llama la atención y de hecho les dice que los perros tienen que estar atados, y hay un cartel informativo a la entrada de este parque, pero cuando se da la vuelta los vuelven a soltar. Considero que tenía que haber más presencia policial, y al propietario que tenga un perro suelto sancionarlo y pedir la documentación de ese animal para saber si está autorizado para poder estar en la vía pública y más en un parque suelto donde hay personas mayores, niños, gente que no está tranquila porque esos animales no están controlados ni por sus dueños ni por nuestras autoridades.

Francisco Calvo Piris **

Cáceres