Profesor

Para que el personal se haga una idea de la importancia que tiene la Comisión Municipal de Cultura basta que eche un vistazo a los pasos que se han dado con el tema de la medalla. Nadie más que los componentes de la comisión, y quizá no todos, sabía que desde hacía unas semanas había reuniones con la intención de cambiar reglas y caras de medallas que procedían de principios del siglo XX. ¿Qué puede esperarse de la Comisión de Cultura? Alguna colaboración en un premio, subvencionar a una revistilla, dar nombre a una calle, ayudar a las cofradías, en fin, cosas de poca monta. Pero mira por dónde el Periódico saca en primera página el caso de la medalla y todos comprenden que han metido la patita. O sea, que si no sale en primera página es posible que hubiera llegado al pleno y se hubiera aprobado sin problemas. Para más esperpento, resulta que después de armar el lío se demuestra que la medalla ya no tiene a la Virgen desde hace años y cada medalla es diferente. Es decir, que nadie ha mirado la medalla ni por curiosidad. Bueno, Saponi, sí, porque Saponi asegura que sabía que los socialistas la habían cambiado. Pregunta: ¿Y no aprovechó la ocasión entonces para echar al pueblo encima de los laicistas? Porque si Saponi sabía que se había cambiado una cara de la medalla y no dijo nada, ¿a qué viene ahora ese escándalo y obligar a su concejal a bajarse los pantalones?

Pues este ridículo caso puede dejar cadáveres políticos. El más tocado ha resultado ser el concejal de Cultura. José Diego intenta mantener el tipo y asegura que Saponi no le ha desautorizado. Probablemente le habrá dicho algo más gordo. El hombre se ha puesto muy nervioso, pues hasta ahora había procurado medir bien sus intervenciones, sus artículos despedían la suficiente coba al alcalde como para pensar en repetir legislatura y de pronto, por una tontería se ve en peligro de caer en desgracia.

Véase el artículo sobre el hospital, que algo tiene que ver con la cultura pero nada con su concejalía, en el que se deja constancia de que Saponi pidió el hospital hace mucho tiempo. Y no un hospital cualquiera.

Como puestos a dar vaselina uno puede llegar a exagerar, no tiene empacho en reiterar varias veces las alabanzas al alcalde. Tampoco te pases, que luego se nota mucho. Aunque no sé si será suficiente. Probablemente necesitará muchos más artículos y mucha más coba para deshacer el entuerto. De manera que como éste lo escribió antes del suceso, qué dirá en el próximo.

Además, no sé si le hace un favor o le pone en un aprieto. Si hace tanto tiempo que Saponi pidió el hospital, serían horas en las que el hospital dependía del Ministerio de Sanidad que gobierna el PP. ¿Por qué no le hicieron caso? ¿Cómo reaccionó él? Supongo que habrá papeles en los que conste su decidida intervención y su airada respuesta cuando ni siquiera le contestaran. Porque si con tan escaso presupuesto asegura que no es posible construir un hospital de primera, qué podrá hacerse con presupuesto cero patatero.