XAxl día de hoy la degradación del planeta es una realidad y también un problema. El cambio climático lo visualiza en toda su extensión, profundidad y complejidad. La entrada en vigor del Protocolo de Kioto visualiza esa realidad y el problema al que se enfrenta la humanidad. Un problema que viene de largo, el efecto invernadero, que no para de crecer y el protocolo que pretende nada más y nada menos que se reduzcan a nivel mundial las emisiones en un 5,2% entre 2008 y 2012, sin estar dentro Estados Unidos, el país que más emisiones expulsa a la atmósfera.

España emite actualmente un 45% más gases efecto invernadero que en 1990 y la Unión Europea asignó a España para poder cumplir con Kioto que nuestro país podría emitir en el 2012 un 15% más que en 1990, y tendría que limitar a un 15% el incremento de gases entre 2008 y 2012. Para eso, cada empresa tiene que adaptarse a la asignación anual del Plan Nacional de Asignación, y si no es posible esta adaptación las empresas tendrán que ir al mercado de emisiones.

Extremadura no se queda fuera de estos planes y se les ha asignado para el sector de la Siderurgia para el periodo 2005-07, 247.914 toneladas de CO2; para el sector de tejas y ladrillos, 210.642 toneladas; y para el vidrio 189.327 toneladas. En total, 647.883 toneladas. Los planes del Gobierno prevén en el año 2012 que las emisiones superen en un 24% el nivel de 1990, una parte de ese 9% de incremento vendrá de la cooperación y otra, de la compra de emisiones, una bolsa de CO2. Todo un reto.

Problemas como la contaminación en la atmósfera, la desertización, la deforestación, los residuos radiactivos, etcétera, son problemas que se generan muy próximos a los ciudadanos, pero se responden muy lejos de ellos.

La problemática ambiental no ha conseguido movilizar y priorizar a los decidores con la urgencia que requiere la realidad del medio ambiente. El medio ambiente ha entrado en las políticas públicas desde los grandes ejes de intervención, los grandes principios y declaraciones, pero no ha calado en la vida cotidiana de los ciudadanos.

Escribía R. Brown : "Si la degradación física del planeta se convierte en la principal preocupación de la comunidad mundial, la preservación ecológica pasará a ser el principal organizador de este nuevo orden. La agenda del mundo será más ecológica y estará dominada por la relación entre las naciones y naturaleza más que por las relaciones entre naciones".

Creo que de seguir así no estaremos muy lejos de esta afirmación, y las amenazas que ciernen sobre nosotros nos hagan reflexionar sobre el conocimiento y no sobre la sensibilidad de los hechos.

El argumento de la tecnología y la excesiva confianza como panacea no puede frenar este deterioro ambiental como argumenta Ulrich Beck en su libro "Las políticas públicas en la sociedad del riesgo: estamos en el supuesto de la dominabilidad técnica que se convierte de golpe en la irracionalidad tecnológica... Chernobil ha dejado al descubierto el caos administrativo real existente... Cuando hay un incendio llegan los bomberos, en caso de tráfico paga el seguro. Esta cooperación del antes y después, de seguridad del presente que toma precauciones para el peor caso hipotético, queda negada en la era atómica, química y genética"

*Licenciada en Ciencias

Políticas y Sociología