WEwn Extremadura, las parejas cada vez se casan menos, con más edad, y los primeros hijos llegan a edades más tardías. El último estudio del Instituto Nacional de Estadística (INE) resulta, cuando menos, significativo, sobre todo por la evolución registrada en la región en las tres últimas décadas. En ese periodo, mientras la tendencia a la baja de matrimonios en España ha sido de un 20%, en la comunidad este porcentaje se sitúa en torno a un 28%.

Hoy, la edad media de los novios que deciden formalizar la relación está 6 años por encima de la que tenían hace 30 años. Para muchos expertos, la nueva fotografía es la consecuencia de un cambio de cultura, de hábitos de vida. Sin embargo, tras este cambio estadístico hay también una destacada referencia económica. La dificultad para lograr la estabilidad laboral, los bajos salarios o el encarecimiento de la vivienda, son argumentos más que suficientes para que los jóvenes se decanten por otras fórmulas de independencia antes de optar por un nuevo núcleo familiar. Que en el 2004, en Extremadura, se casaran 2.100 parejas menos que en 1975, nos ayuda a entender que en este tiempo nuestra forma de entender la vida ha evolucionado mucho más rápido que nuestro bolsillo.