Maestro

Hace unos días volví a ver al mirlo picoteando las migas de pan que tiene que compartir con los gorriones. El pago de un puñado de euros por parte del jefe de gabinete del alcalde al ofendido, ha sido la sentencia del juicio rápido que ha resuelto la denuncia del candidato de EU. Ojalá no se vuelvan a repetir sucesos como estos. Se pegaron los carteles y comenzó la campaña electoral. Mucho mejor la foto cacereña del alcalde. Es tiempo de avalancha de mensajes en los medios de comunicación, de mítines sin asistentes, de ausencia de debates y de muchas promesas. Algunas, por cierto, parece que están llamadas a no cumplirse, pues en todas las campañas y programas aparecen aunque nunca se indica la fecha de su cumplimiento. La verdad es que si echas la vista atrás y recuerdas cómo estábamos y como estamos, nadie puede negar que la transformación sufrida por nuestra tierra ha sido profunda y que hemos avanzado, y mucho, en compromiso y participación ciudadana y que los frutos de las políticas desarrolladas en todos los campos están dando resultados visibles. En las cosas que aún siguen dependiendo de Madrid el ritmo es más pausado. El estado lamentable de la red ferroviaria y la lenta metamorfosis de la 630 son un claro ejemplo. La estrella de la campaña actual es el tren de alta velocidad y por si acaso Floriano ha ido a Portugal por carretera a tratar del asunto. ¡Lástima que Cascos no se casara en Cáceres! A la vista de las promesas hechas por el ministro al candidato a la alcaldía de Córdoba, que ofició su segunda boda, las plusvalías para la ciudad van a ser notorias y notables. Si es verdad lo que dice el candidato podría poner en un compromiso al ministro, pues esa forma de actuar tiene un nombre que está contemplado en el inventario de delitos. Por aquí, como en otras ocasiones, veremos pasar a casi todos. Aznar ha sido el primero y ya no volverá porque esta plaza es difícil, aunque a juzgar por el éxito de Valencia parece que no es oro todo lo que reluce. Con los jóvenes no lo tiene fácil. Unos con el no a la guerra y otros con el retrato del Ché se empeñan en amargarle los mítines. Son días de mensajes y promesas de unos y de otros. Hablando de mensajes, el viernes una paloma mensajera se mostraba agotada y desorientada. Bajé a la calle con un puñado de arroz y un recipiente con agua. Era admirable la destreza para localizar cada grano de arroz entre el empedrado. En su pata izquierda una anilla verde y en la derecha una amarilla con la fecha del 2001 y números y letras. Es curioso cómo los animales no recelan de quien les ayuda. Terminó comiendo tan cerca de mí que casi pude tocarla. Una vez que hubo comido y bebido alzó el vuelo hasta un tejado y desde allí partió a su destino. Por lo demás, el Womad ha cumplido un año más. A destacar la calidad de los músicos de nuestra tierra. Ha habido tal número de tenderetes en la plaza que si la tasa ha sido parecida al precio del alquiler que el ayuntamiento quiere cobrar, mediante subasta, por un local de su propiedad, junto a la torre de los púlpitos, la recaudación habrá sido sustanciosa. Y es que por 20 metros cuadrados pretenden que alguien pague de salida 60.731 pesetas mensuales, y con todos los gastos por cuenta de quien se quede con él. Eso se llama apoyar al pequeño comercio.