No, no es la letra de ninguna canción de Chikilicuatre. Ayer salió el estudio de Asempleo sobre el mercado laboral y no con muy buenas noticias ni para Extremadura ni para el resto del país. Según datos de esta patronal privada, salvo contadas excepciones en algunas comunidades autónomas, la desaceleración en el porcentaje de ‘ninis’ se ha parado de sopetón en el último año. Del 31 por ciento en 2008 ha ido rebajándose la cifra al 18 en 2017, pero en este último año, la caída ha sido sólo del 0,03.

Según este estudio, Baleares con el 19,4 por ciento, Andalucía con el 16,6, Canarias con el 16,3, Extremadura con el 16,2 y Comunidad Valenciana con el 14,8 encabezan la lista. Por abajo, y por debajo de la media, País Vasco, Madrid y Castilla y León. El estudio también incide en otros marcadores, como las probabilidades de encontrar un primer trabajo a partir de los 16 años o la relación con la cualificación y el desempeño laboral de los que han tenido la suerte de encontrar empleo o la temporalidad de los contratos.

Por desgracia en Extremadura se junta también el peor dato sobre el primer acceso al mercado laboral de nuestros jóvenes.

El estudio establece una relación directa entre la tasa de abandono educativo y los ‘nini’, de hecho, gran parte de las «culpas», siempre según el estudio, es el incremento en el 2% de los jóvenes dentro del grupo de edad de referencia que han venido a engrosar dichas estadísticas.

Sin embargo, que no aparece en el estudio, ni se hace referencia a ello en ningún lado, en nuestros presupuestos, los generales, ya venía contemplado una medida que quizás, haya ayudado un «poquito» a esa desaceleración o por el contrario ayudará definitivamente a rebajarla, el tiempo y la calidad del trabajo ofrecido serán determinantes. El llamado «cheque nini».

Este consiste en una ayuda directa de 430 euros mensuales para jóvenes menores de 30 años que ni estudian ni trabajaban, vinculada a un contrato de formación y con una vigencia de hasta 18 meses. Una vez aprobados los presupuestos en 4 de julio, la cuestión es esperar a su publicación y tramitación.

Por ahora se sabe poco sobre ello pero como no todo es oro lo que reluce, existen ciertas condiciones, y una de ellas, al parecer, es encontrarse de alta como demandante de empleo en el plan de garantía juvenil. Aun así, como digo, habrá que esperar a ver si esa partida se materializa. Incluso si se hiciera, habría que estar expectante, pues las empresas pueden ver las puertas abiertas a subvenciones perpetuas ofertando multitud de contratos de formación a costa de contratos estables y bien remunerados.

Es cierto que algo debemos hacer pero lo primero es lo primero, como bien dice el estudio, rebajar la tasa de abandono escolar temprano, y eso sí es seguro, el ‘cheque nini’, disculpen muestre mis reservas, porque no sé si lo solucionará o lo agravará.