Hace nueve años, por razones económicas, tuve que irme de España a buscarme la vida. Al cabo del tiempo pensé en volver sin comprender por qué empresas multinacionales abandonan el país; sin entender el porqué de los problemas políticos actuales. Y quiero que vean lo que veo yo desde fuera al intentar volver a mi tierra. Me arruiné y no puedo volver a tener una cuenta corriente porque las deudas de mi compañía siguen persiguiéndome. En el 2007 los bancos arruinaron mi empresa y ahora han sido financiados por el Gobierno, creando bancos malos con los activos que se quedaron de mi empresa y otras. Ellos están saneados y yo no existo. No puedo hacer ninguna inversión porque me lo embargarían todo, pero los bancos siguen impunes. Mi mujer, mis hijos y yo carecemos de Seguridad Social y de ningún tipo de cobertura sanitaria, sin embargo, tenemos pasaporte español. Ellos me preguntan si no quiero volver a casa y yo no sé qué contestar. Los bancos y los políticos han creado una España rota, donde hay mas de 2.500 casos de corrupción entre banqueros y políticos, casi todos en la calle, y yo y otros como yo, desterrados social y económicamente. Yo he creado empleo y otros lo han destruido. Solo tengo una salida: renunciar a mi nacionalidad. Esta es mi historia, por si un día alguien pregunta por qué algunos que se fueron nunca volvieron.