Mozambique, aparcas el centro de la capital y cuando sales del coche un señor se ofrece a vigilártelo. Si le dices que no es necesario oyes como dice: "Eu no estou a guardar o carro!".

Al oír al dimitido presidente de Portugal cuando afirmaba que el parlamento luso se había equivocado al no aprobar el plan de recortes sociales que había negociado con la Comisión Europea recordé aquel guardián de coches mozambiqueño. No porque también hablara portugués sino por el aviso que daba: ¡si no quieres pasar por el aro, prepárate!

Ante ello me pregunto: ¿no hay nada más que hacer para aplacar los buitres de mercados de capital que hoy amenazan nuestras moribundas economías que aplicar recortes sociales? ¿Esta es la única vía para ajustar el déficit? No, hay otras puertas de salida. ¿Cuáles? Aumentar los impuestos sobre las rentas y los patrimonios a las clases más pudientes. Por ejemplo, en el caso español, antes de aprobar más recortes sociales se debería restablecer el impuesto sobre el patrimonio (eliminado en 2008), recuperar el impuesto sobre sucesiones y donaciones o bien grabar de verdad sobre los beneficios de la banca y de las grandes empresas... En este sentido, ¿saben cuál fue el beneficio de las empresas que forman el principal indicador de la bolsa, el Ibex 35, el año 2010? La cifra récord de 51.637 millones de euros, a pesar de ser un año en que la economía del país decreció. ¿Cómo puede ser que en plena crisis económica estas empresas tengan un récord de beneficios tan escandalosos? ¿Saben que esta cifra supone más de tres veces el importe por el cual se justifican los recortes sociales del 2010?

Ahora que el parlamento luso ha sido valiente y ha dicho que de esta manera no, sería necesario que nos quedara claro que hay otras salidas posibles a la actual crisis, pero que éstas pasan, necesariamente, por grandes movilizaciones sociales. Si no, ya sabemos qué debemos hacer cuando aparcamos el coche para no encontrártelo desvalijado cuando vuelves...

Daniel Gómez **

Correo electrónico