Los días pasan y las incertidumbres crecen. La formación del gobierno se estanca y los problemas no se resuelven. Las guerras internas se abren y los extremeños pagan sus consecuencias. Y mientras tanto muchos hablan de lo que nada soluciona. Por eso hoy más que nunca necesitamos altura de miras. Nada puede nublar el fin para el que estamos aquí, servir a España y a Extremadura, a los españoles y a los extremeños. No se puede vivir instalado en permanentes campañas electorales. Debemos hacer un alto en el camino y analizar hacia dónde queremos ir. Eso es lo que esta semana hemos hecho en el PP de Extremadura en nuestra reunión interparlamentaria en la ciudad de Almendralejo.

Hemos analizado la situación actual y la conclusión no es otra que lo que ya veníamos advirtiendo. Hoy los datos confirman el retroceso en las políticas económicas y de empleo, donde los jóvenes, las mujeres y los autónomos se llevan la peor parte. En tan solo un año de legislatura Extremadura cuenta con 681 empresas menos, 1.282 autónomos menos o 7.883 trabajadores más en paro en el sector privado. En el último mes 240 autónomos menos, 4.174 parados más, 1.419 jóvenes más en paro o 3.000 mujeres que perdieron su empleo.

Esto es tan solo una parte del frenazo al que se está sometiendo a nuestra tierra. Son consecuencias directas de tener un Gobierno que no funciona en Extremadura. Por eso tampoco podemos tener por más tiempo un gobierno en funciones a nivel nacional.

Hoy más que nunca España y Extremadura nos necesitan. Necesitan que ante las palabras «enfrentamiento, parálisis, retroceso, división», imperen las de «responsabilidad, estabilidad, unidad y crecimiento», y que ante los problemas internos se prioricen los problemas de los ciudadanos. Más vosotros y menos nosotros. Más todos y menos unos pocos. Más tú y menos yo, que es la mejor forma de entender y de entenderse. Muchos trabajan ahora en estrategias, tacticismos y rompecabezas. La nuestra sigue siendo el compromiso de lealtad con nuestra tierra, de respeto a nuestros paisanos y de responsabilidad como partido. Allí donde Extremadura nos necesite, estaremos. En gobierno y en oposición. No diremos «no es no» cuando lo que está en juego son los extremeños, aunque entren ganas de devolverle a algunos los agravios sufridos durante cuatro años. Somos distintos. Al igual que a la inmensa mayoría de nuestros paisanos, lo que nos une es Extremadura.