Desde UGT hemos venido demandando el establecimiento y desarrollo del Sistema de Protección Social, entendido éste en un sentido más amplio que el de Seguridad Social y por tanto más allá de las prestaciones económicas, como el cuarto pilar básico de lo que conocemos como Estado de Bienestar, configurándose por tanto, a través del establecimiento de una red de servicios sociales públicos, plurales y de calidad, a la vez que sean correctores de los distintos desequilibrios interterritoriales.

Es fundamental que la financiación de este sistema sea estable, suficiente y sostenible en el tiempo asegurando el equilibrio necesario que tiene que haber, manteniendo con la implantación del sistema la cohesión social a través del desarrollo de la red de servicios sociales para la atención a la dependencia públicos y de calidad, que aseguren a toda la población el acceso a la protección social de forma igualitaria y solidaria, evitando disparidades y desequilibrios en los diferentes territorios y garantizando los mismos niveles de derechos y obligaciones. El papel de la Administración central, regional y local es fundamental ya que el nuevo sistema estará sustentado en la financiación por las mismas.

Se estima que la universalización de las prestaciones tendría un coste adicional de seis décimas del PIB, lo que situaría el gasto total en aproximadamente el 1% del PIB.

En nuestro país, no sólo existe descoordinación entre las instituciones sanitarias y asistenciales, sino también entre las distintas administraciones estatales, autonómicas y locales. Situación que deben contribuir a paliar de manera decisiva las comunidades autónomas. Extremadura está adelantándose a encontrar y proponer propuestas y soluciones a este problema de descoordinación. El Plan Marco de Atención Sociosanitaria 2005-2010, debe ser el instrumento de coordinación entre los sistemas sociales y sanitarios que debe llevar a permitir ordenar nuestros recursos para atender a este nuevo derecho social y por ello es absolutamente necesario contar con todas las voluntades.

Los Acuerdos de Política Social que UGT firmó con el Gobierno regional y otros agentes sociales y económicos concreta políticas y medidas para acometer la futura implantación y desarrollo del sistema regional de dependencia, tales como: la priorización en la prestación de servicios sobre la prestación económica; el establecimiento de criterios básicos y objetivos de concertación de servicios que garanticen una calidad adecuada en la atención a los usuarios; el abordar de manera especial la definición de la cualificación laboral de la figura del cuidador, etcétera.

XPOR OTROx lado, desde UGT, entendemos que el Sistema Nacional de Dependencia va a tener una dimensión de género evidente que conviene resaltar. En el ámbito laboral, porque va a facilitar que muchas de las actuales cuidadoras puedan incorporarse al mercado de trabajo.

En el ámbito de los derechos sociales, porque va a posibilitar que aquellas mujeres que opten por seguir cuidando a un familiar puedan acceder más fácilmente a las prestaciones de la Seguridad Social, especialmente las pensiones, como derecho propio. En el ámbito personal, porque la realización de estos cuidados por profesionales va a mejorar la calidad de vida, desde luego de los beneficiarios, pero también de las cuidadoras actuales.

Desde UGT pensamos que además del bienestar que supondrá para las personas en situación de dependencia y sus familias, este tipo de servicios reportará a la sociedad otro tipo de beneficios. El más importante, el empleo, ya que estos servicios son muy intensivos en mano de obra y, facilitará que muchos de los cuidadores actuales puedan incorporarse al mercado de trabajo y que afloren empleos que en la actualidad se vienen realizando de forma sumergida o irregular.

Por tanto, estamos ante el futuro desarrollo e implantación del cuarto pilar del Estado del Bienestar. La dimensión social del mismo requerirá de la intervención de los poderes públicos y pondrá a prueba la capacidad de la sociedad y de sus instituciones para adaptarse a las nuevas realidades sociales.

*Secretario de Política Institucional

UGT-Extremadura