XExstamos dispuestos a reconocer que el clima está cada vez más relacionado con los modelos económicos y sociales asociados a la quema de carbón y petróleo? ¿Estamos dispuestos a reconocer que la disminución en las emisiones de CO2 puede ser la solución al cambio climático? ¿Qué estamos haciendo desde Extremadura para acercarnos al desarrollo sostenible? ¿Estamos ayudando a desarrollar las energías renovables y la eficiencia energética? Si nos fijamos en la Junta en lugar de incentivar a las empresas eficientes energéticamente y la innovación tecnológica sostenible, nos presenta como solución-milagro el apoyo a los sectores más contaminantes. Nuevas minas y siderurgias, cementeras y refinería, todas industrias de gran impacto ambiental, que van contra el Protocolo de Kioto. Propuestas de desarrollo que nos alejan de un modelo económico sostenible y que apuntan hacia un progreso industrial basado únicamente en unidades de producción y no en términos de capacidades. Y son en éstas donde encontraremos los empleos estables de futuro y donde legaremos a las generaciones venideras oportunidades que nosotros no tuvimos.

Por esto, ADENEX viene reclamando un Plan de Energías Renovables y Eficiencia Energética que pueda servir de marco al desarrollo industrial y social de Extremadura. Un plan que fue exigido en la Asamblea y aprobado con el compromiso de la Junta para darlo a conocer en un plazo de un año. Un Plan que todavía seguimos ignorando, pero que se sigue anunciando como sólo energía eólica en declaraciones recientes del director general de Energía. Ni la energía solar activa para obtenerelectricidad, ni la térmica para obtener agua caliente, ni la pasiva como forma de ahorro energético, son tenidas en cuenta como verdadero potencial en nuestra región y sin embargo representan iniciativas empresariales nuevas y creación de empleo.

ADENEX siempre ha defendido la energía eólica, como energía renovable y limpia, pero no a cualquier precio y siempre debiendo ser compatible con la protección del medio ambiente. Extremadura, con escasas posibilidades de viento y emplazamientos adecuados (entre 600 y 800 megavatios eólicos), tiene que decidir su instalación en las mejores condiciones tecnológicas y de menor impacto ambiental, pero en ningún caso dar autorizaciones en espacios protegidos. Ni siquiera ante las presiones de algunos alcaldes que se dejan embaucar por un dinero fácil en el momento de la construcción pero que luego van a estar sujetos a percibir únicamente lo que produzca cada parque eólico. Pensar que con cemento, caminos hacia la sierra y tendidos eléctricos vamos a desarrollar las comarcas del norte de Extremadura es una equivocación que merece la pena plantear a los ciudadanos de aquí.

Para ADENEX la autorización de parques eólicos en Extremadura nunca deberá hacerse en lugares que tengan algún régimen de protección ambiental, pues servirían para impedir lo ya iniciado con tanto esfuerzo en pos de un desarrollo rural participativo. En conclusión, apoyamos la energía eólica en lugares adecuados, los pequeños aerogeneradores como instalación mixta para la energía solar fotovoltaica, en aprovechamientos agroganaderos, o en todos los polígonos industriales de la región. Por supuesto siempre cumpliendo con la legislación, también materia de impacto ambiental.

ADENEX defiende la energía eólica, pero no a cualquier precio. No se deben autorizar parques en espacios protegidos. Ni siquiera ante las presiones de alcaldes que se dejan embaucar por un dinero fácil, porque es una equivocación