L adies and gentlemen, we got him". Desde que en mayo pasado fue nombrado administrador de EEUU en Irak, el presidente de la Autoridad Provisional de la Coalición (APC), Paul Bremer (Hartford, Connecticut, 1941), soñaba con poder pronunciar el famoso "lo tenemos" referido a la captura de Sadam. Ya lo tienen. ¿Qué harán con él?

No ha sido fácil. Mes y medio después de aterrizar en Bagdad, el propio Bremer declaró a la BBC: "Las posibilidades de atrapar a Sadam son muy altas". Han transcurrido casi ocho meses desde el inicio de la posguerra para poder dar con el paradero de un dictador que ejercía de topo y no de tigre. Las dos cosas más importantes que Bremer le pidió a Bush fue tiempo (lo está teniendo) y plenos poderes (parece que los tiene). De momento, el responsable de que Irak vaya normalizándose subraya que "la seguridad no es un requisito previo para la reconstrucción, sino que forma parte de la reconstrucción misma". ¿Se puede pacificar como es debido estando de entierro permanente?

Diplomático reciclado en la especialidad del contraterrorismo, Bremer ha tenido como valedor para el cargo actual al vicepresidente Dick Cheney. De 1989 al 2000, fue pieza importante en el bufete Kissinger and Associates, del exsecretario de Estado Henry Kissinger. Buenos padrinos para un bautizo.