Diputado del PSOE

La ciudad deportiva del Real Madrid se construyó sobre un terreno público cedido al club en tiempos de Franco. No hace mucho se recalificó. La operación urbanística fue incomprensible, pero se sanearon, de la noche a la mañana, brillantemente, las cuentas del club, que distaban de ser boyantes. Los directivos descontarían, supongo, las protestas de sus competidores, especialmente las que habían de provenir de Barcelona.

Con lo que, seguramente, no contaron fue con la intervención del Comisario Europeo Mario Monti en defensa de la competencia. No será un escollo menor. En cualquier caso y en Madrid, la recalificación del suelo entrega cada año a los especuladores 8.000 millones de euros en plusvalías. Vivimos en el paraíso terrenal.