WLwa Cámara de Comercio de Cáceres dio ayer a conocer un estudio sobre la capacidad exportadora de las empresas de la provincia y también de la región que pone de manifiesto algunas de las características del comercio exterior extremeño. La primera, y más importante por su significación, es que las empresas que exportan son muy pocas --alrededor de 360-- y que, de éstas, sólo diez acaparan la mitad de las exportaciones. No son datos que permitan hablar de que en la región existe una importante cultura exportadora, o de que los planes para la exportación puestos en marcha por la Administración regional puedan servir de modelo, como, en algunas ocasiones, se ha encargado de pregonar el consejero de Industria y Comercio. Por el contrario, el estudio del que ayer hablaron el presidente de la comisión de comercio exterior de la Cámara cacereña, Gabriel Alvarez , y el técnico de esta institución, Víctor Gragera , muestra que la exportación es más un empeño individual --de determinados emprendedores--, que un impulso que anima al conjunto del sector empresarial extremeño; más de productos y mercados muy concretos (la mitad de las exportaciones son de alimentos, y el 80% a cinco países de la UE) que de gran variedad de bienes y naciones.