WEw l Anteproyecto de Presupuestos Generales del Estado para el 2008, que ayer fue presentado por Pedro Solbes, vicepresidente y ministro de Economía, en el Congreso de los Diputados para su tramitación parlamentaria, recoge, sobre todos, un dato referido a Extremadura que lleva a una conclusión: el tren de Alta Velocidad entre Madrid y Badajoz no estará listo en el 2010. No es que cupieran muchas dudas de que en esa fecha, y sin haber empezado todavía una obra de la envergadura de ésta, se cumpliera ese plazo --y de hecho en el anteproyecto de Presupuestos Generales del Estado del 2007 ya se ponía de manifiesto que no estaría hasta, al menos, el 2011--, es que los responsables políticos del Gobierno seguían manteniendo, contra lo indicado en el Presupuesto que ese mismo gobierno elabora y aprueba, la fecha del 2010 y, como responsables de las cuentas y de las partidas presupuestarias que son les cabía el beneficio de la duda. Ya no, ya no caben más dudas. Y es que en el texto presentado ayer por Solbes no se incluye siquiera el 2011, sino el 2012 como el año de terminación del AVE. El desarrollo de la inversión plurianual se hace con ese horizonte, disminuyendo incluso las inversiones previstas en el 2008 y 2009 de las que, para esos mismos años, recogían el Presupuesto del 2007. Es decir, que la inversión del AVE ha experimentado un retroceso porque ahora se distribuye en un año más.

Estas cuentas pueden ser reformadas, y de hecho en la tramitación parlamentaria que sufrió el Presupuesto en vigor, Extremadura pasó de atribuírsele una inversión directa de 585 millones, que eran los que recogía el Anteproyecto, a recibir 628 millones, 43 más. Es de esperar que ese año también se incremente la inversión, como mínimo en los 50 millones prometidos por Solbes al presidente Fernández Vara, según anunció éste en la tarde de ayer.

Extremadura tiene asegurados, sin contar con esos 50 millones 679en inversiones directas. Eso significa 55 millones más que el año pasado, pero aunque el porcentaje de incremento, alrededor del 8%, es superior que el de otras comunidades, no oculta que lo destinado por el Ejecutivo de Rodríguez Zapatero supone un revés en las expectativas de la región. Hace apenas una semana, el presidente de la Junta exigió al Gobierno que cumpliera sus compromisos y que la financiación de los mismos se reflejara en el Presupuesto. Pues bien, no ha sido así: se mantienen, sí, los plazos de la autovía Cáceres-Trujillo, que actualmente es la mayor infraestructura vial que el Estado tiene en marcha en la región, y también los proyectos de autovías de Zafra-Huelva, Badajoz-Levante y Badajoz-Granada, que no pasan de los estudios preliminares que ya se reflejaban en el actual Presupuesto, pero el parón del AVE resulta tan decisivo que se ha convertido en el proyecto que mejor expresa el compromiso --o la falta del mismo en el grado que se esperaba-- del Estado con Extremadura.

Esta región, en parte, ha sido víctima del momento pre-electoral en el que está inmersa la política nacional: el Gobierno ha hecho un guiño a aquellas dos comunidades, Cataluña y Andalucía, que pueden ser determinantes en el resultado de las votaciones y en el de la formación del posterior gobierno.