WLwa manifestación a favor de la refinería en Tierra de Barros, que tuvo lugar el sábado en Villafranca, guardaba una sorpresa: la de que el Gobierno tiene previsto ubicar en la provincia de Cáceres un "importantísimo" proyecto, que debe ser parangonable al de la planta de refino puesto que se ha anunciado como su compensación. Quien hizo el anuncio fue el presidente de la Junta. Como es natural, y debido a que la noticia la dio quien puede hacerlo --aunque Rodríguez Ibarra dijo que fue a la concentración de Villafranca en calidad de secretario del PSOE extremeño--, se ha generado una gran expectación, sobre todo en Cáceres. El problema es que esa expectación no está siendo satisfecha por la Junta porque después del anuncio del sábado ha habido, en primer lugar, silencio --el Ejecutivo autónomo se limitó el martes a decir que no puede dar ningún dato al respecto--, y, ayer, una conversación entre el presidente y el alcalde de Cáceres, José María Saponi , que ha aclarado poco las cosas. En cualquier caso, en este asunto ha habido un problema de información, porque un mitin no es el lugar para dar cuenta de una iniciativa gubernamental del calado y de la importancia social que se le supone a ésta porque corre el riesgo de no hacerla creíble, aunque sea verdadera.