Jesús Muñoz subía frecuentemente a la ermita del Puerto de Plasencia en compañía de su perro. Veía que otros muchos placentinos lo hacían solos y se le ocurrió que podía crear una asociación para unir a todas esas personas. Así nació la Asociación de Senderismo El Bordón hace seis años y ahora, no solo programan rutas cada domingo por Plasencia y su entorno sino que viajan por toda España y este año se atreverán incluso con los fiordos noruegos.

"Nunca pensé que fuese a pasar esto", señala Muñoz en relación a la cantidad de personas que se sumaron a su proyecto --casi 1.500 ya-- y a la cantidad de rutas que han podido realizar hasta ahora. "El Bordón nació solo con la idea de subir al Puerto y no hacerlo solo, pero cada miembro de la asociación ha ido aportando cosas y ahora hay una relación social tal que el grupo de asiduos nos hemos convertido en una pequeña familia y te sientes muy bien".

Tanto es así que destaca que incluso se han creado parejas entre los socios en estos seis años.

Respecto a los parajes recorridos, Muñoz explica que comenzaron sus rutas en torno al monte de Valcorchero y paulatinamente fueron ampliando su radio de acción. Así se han pateado ya zonas del entorno de Plasencia y de las comarcas del Norte, pero también han viajado a Asturias, a los Pirineos o a Portugal, por poner un ejemplo. "Nos atrevimos a coger un avión para ir a Madeira", recuerda, y ese verano van a dar un paso más porque su destino será Noruega. "Vamos a ir desde Cabo Norte hasta Oslo y ya tenemos lista de espera y 55 personas apuntadas", subraya.

Porque sus rutas no consisten meramente en caminar y estar en contacto con la naturaleza, sino que también dan mucha importancia a la gastronomía de la zona a la que van y a conocer sus entresijos e Historia. Del apartado culinario, Muñoz destaca: "Es importantísimo, por eso, después de una ruta en la que has hecho un esfuerzo, nos damos un homenaje y nos metemos un cocido, por ejemplo, entre pecho y espalda".

Por otro lado, para conocer los lugares que recorren, se sirven, bien "de amigos que los conocen y nos los enseñan o contratamos guías profesionales para que nos acompañen, tanto en los recorridos al aire libre como en las visitas culturales, queremos ir más allá". Un ejemplo será su visita a una finca con ganadería brava en mayo, donde está previsto que se acerquen al os toros y sus comederos e intentarán torear vaquillas.

Pero ese ir más allá lo completan con las relaciones sociales. Por eso, para Muñoz, todo en El Bordón "es positivo. Hay naturaleza, cultura, buen ambiente y una actividad saludable. Que venga el que quiera porque no cuesta nada, los viajes los pagamos entre todos".