El otro día fui a Madrid y entré y salí por la M-30. Pude observar ingentes grúas articuladas, excavadoras, hormigoneras... y mucha mano de obra. Pura tecnología. Detrás de toda esta tecnología, está: el acero, la madera, el plástico, la rueda, poleas, engranajes, motores, energía eléctrica, energía química, instalaciones de agua, etcétera, y, lo más importante, personal cualificado. Con toda seguridad, las empresas que realizan las citadas obras han utilizado, y utilizarán hasta que terminen, otras muchas tecnologías (emergentes, claves, básicas...) como las TICs (informática, alámbricas, inalámbricas, telégrafo, teléfono, radio, tv...), como tecnologías CAD, de Control de Calidad, etcétera. Todas estas tecnologías se aplican, en la medida que sean necesarias, para la realización del proyecto que llevan a cabo, con el fin de ofrecer un mejor servicio al ciudadano resolviendo no pocos problemas (paro, accidentes, atascos...).

Cuando regresé a mi pueblo, vi en las noticias de TV que se había inaugurado en Madrid, la tuneladora más grande del mundo. Pero no se ha fabricado aquí. Tecnología punta, sí, pero importada de Alemania. A esto estamos y seguiremos estando condenados, si continúan por el camino de limitar la formación tecnológica de nuestros estudiantes de ESO y Bachillerato. Lo sufrirán las carreras universitarias (técnicas), las empresas, el sistema productivo y al final lo pagaremos todos. Los profesores de Tecnología de ESO enseñamos a nuestros alumnos (12-16) todas estas tecnologías, y algunas cosas más. El Ministerio de Educación, en su proyecto de Ley de Educación (LOE) pretende reducir drásticamente (más de un 66%) la materia de tecnología. Creemos que esta formación tecnológica, al igual que la formación en ciencias, humanidades y arte, es un pilar básico de la educación y debe impartirse en esta etapa, como hasta ahora: obligatoria en 1.º, 2.º y 3.º, y no, en un solo curso de éstos, como pretende el MEC. Me imagino al señor Tiana, secretario general de Educación, diciendo aquella frase de Unamuno: ¡que inventen ellos!, los alemanes, se entiende. "Tenemos dos problemas en nuestra economía: 1) Generar competitividad, eso supone ese esfuerzo de capitalizar más tecnológicamente España y de no perder ni un minuto en la mejora de la educación (entiendo que tecnológica), y 2) el petróleo..." José Luis Rodríguez Zapatero, entrevista en la Cadena SER, 2005-10-16. Señor Tiana, haga caso a nuestro presidente y no espere a que lo tenga que decir él, de forma más explícita, como con la Filosofía. Nuestra economía está en juego.

JAVIER ESCUDERO ESCUDERO. Cáceres