WLwas empresas pagarán menos impuestos sobre los beneficios que obtengan a partir del 2007. La reducción será escalonada: el tipo bajará en los próximos años del 35% al 30% para grandes compañías, y del 30% al 25% para las pymes. El Gobierno español quiere incluir esta medida entre las reformas tributarias de esta legislatura.

La propuesta, lanzada por el presidente del Ejecutivo, es un mensaje directo a los empresarios. Como tienen que competir en el mercado europeo y mundial, se les va a cobrar los mismos impuestos que se aplican, en promedio, en la Europa más desarrollada.

Es un acierto revisar el impuesto de sociedades porque no era equitativo. No pagaba más quien ganaba más, porque en la práctica las grandes corporaciones empresariales y sus asesores fiscales conseguían reducir al mínimo la cuota final que debían liquidar. En cambio, las pymes sin medios para plantar cara al fisco acababan abonando totalmente sus cuotas. Por esta razón, la reforma del impuesto no ha de fijarse en si son adecuados los porcentajes a cobrar sobre el beneficio anual. Lo definitivo será que se regule la maraña de prácticas contables para evitar el pago íntegro del impuesto que sólo benefician a las grandes empresas.