Dramaturgo

Estoy intrigado, sobre todo después de leer a Mediero que apuntaba la existencia de un reguero de sangre que partía desde San Francisco y se perdía por una calle aledaña. No creo que el reguero sea el mismo que cruzaba la calle República Argentina en dirección a Colón porque no hay sangre que dé para tanto recorrido.

En Badajoz hay regueros y nadie sabe nada sobre su grupo sanguíneo o el propietario de la hemoglobina. ¿De quién es el reguero o los regueros que recorren Badajoz? Es posible que pertenezcan a algún animal herido (tipo elefante por la cantidad) que busca amparo por las calles de nuestra ciudad, pero no es Badajoz una ciudad propicia para amparar animales heridos porque no es ciudad de muchos callejones ni de sótanos con ventanas rotas. Valladolid es ciudad con ventanas sin cristales y gatos frailunos que entran y salen de los sótanos cuando les da la gana y el sol, pero Badajoz es ciudad en la que los animales heridos huyen hacia Tres Arroyos para morir contemplando encinas y parejas que se aman. ¿Y si se estuvieran cometiendo crímenes de los que nadie sabe nada? ¿Y si un asesino anda suelto propinando puñaladas sordas por doquier? No puede ser porque los heridos llegarían a urgencias, harían lista de espera para que les cosieran y saldrían en las estadísticas del SES. Y los muertos aparecerían al final del reguero tumbados en el suelo. Alguien debería ponerse a resolver este misterio que salta a las páginas y nos inquieta. Los regueros de sangre nunca indican nada bueno, son caminos por los que huye la vida, por los que llega la tragedia y delatan muchas cosas. Badajoz necesita que alguien explique este misterio que nos desangra a escondidas.