Leo el artículo de Inocencio Mayoral , que me parece serio y ajustado a ideología. Me gusta la frase que el Periódico entresaca de sus palabras cuando dice que "hay quienes también se sorprenden, como preadolescentes tontas, que alguien pueda tener relaciones con quien quiera y cuando quiera, y encima hasta tácitamente lo criminalizan", porque yo añadiría "con quien quiera y cuando quiera", "como quiera", porque si no queda coja la frase.

Porque lo importante no es elegir a quién, sino de la manera que se quiera, como hizo Lewinski y Clinton . Porque yo no sé quién se habrá alarmado y dónde está el quebranto institucional, que yo no lo veo por ninguna parte. Todo es relativo. Lo que pasa es que la gente quiere cachondeo, y eso es lo peor, por algo que además está a la vuelta de la esquina. Todo debe ser relativo, y la verdad, que lo que escribe Inocente está muy bien.

Pensaba yo en mi amigo Moriano , que lo vi salir de su casa la otra tarde, que el termómetro de Joyería Corrales marcaba 37 grados a la sombra, cuando veo que mi amigo llevaba puesto un jersey de lana. ¿Cómo entender ésto? ¿Es que mi amigo nos estaba provocando? No, es que en la excepcionalidad está el gusto, como lo es estar con un señor si está uno en esa disposición. Lo de mi amigo Moriano además tiene una calidad, porque Moriano es meteorólogo, lo que pasa que está ya jubilado y él penetraba en el tiempo a través de la cresta de un gallo que tenía el Ejército del Aire en las Bardocas. Lo de Marroquín ahora es distinto.

*Escritor y jefe del Servicio Territorial de Cultura en Badajoz