TStabían ustedes que hubo un Papa extremeño? Pues sí, Pedro II, Manuel Alonso Corral , que nació en Cabeza del Buey en 1934. Claro está, era Papa de la Iglesia Cristiana Palmariana de los Carmelitas de la Santa Faz, que tiene su sede en el Palmar de Troya, un pueblo sevillano, cerca de Utrera. A Pedro II le sucedió en el pontificado Gregorio XVIII, o sea Sergio Ginés , exseminarista y exmilitar murciano que ahora ha dado la campanada. Acaba de renunciar a su trono pontifical por amor, algo realmente loable y digno de elogio, aunque no deja de sorprender que quien era un ultraortodoxo con la observancia de las normas se las haya saltado todas a la torera. Tras dejar una carta a los seguidores de la Iglesia Palmariana donde anuncia su pérdida de fe, Sergio Ginés ha declarado que quiere "vivir en paz, pasar página y punto". Para ello se ha ido a vivir con su chica, Nieves Triviño , a Monachil, localidad granadina donde ella es técnico del ayuntamiento.
El caso de El Palmar de Troya es digno de estudio. Tras unas apariciones de la Virgen María a unas niñas, en 1968 Clemente Domínguez Gómez , vendedor de seguros, acapara todo el protagonismo de los fenómenos, presenta estigmas y construye una basílica con aportaciones económicas de las que se desconoce su procedencia. Hace santos a Franco, Colón, Primo de Rivera, Don Pelayo e incluso a Adolf Hitler . Vamos, un descontrol. A la iglesia de Roma la llaman la "gran ramera". Sobra decir que acabaron todos excomulgados.
Clemente, --autoproclamado Papa Gregorio XVII tras la muerte de Pablo VI (el de Roma)-- perdió ambos ojos en un accidente y su imagen en los medios de comunicación era impactante. Ahora, todas las miradas se posan en el nuevo Papa, el suizo Joseph Odermatt o Pedro III, eso sí, no podrá usar el papamóvil, el flamante BMW X5 se lo ha quedado Sergio Ginés, que está enamorado, pero no está tonto. Refrán: Clemente, no te quedes con la gente (Carlos Cano).
