La selección de baloncesto, que dirige Sergio Scariolo , permitió ayer, por fin, que los aficionados respiraran tranquilos, tras su victoria sobre Lituania, merecida y contundente. A partir de ahora, lo que el equipo precisa es coger el ritmo de competición y la efectividad que ha demostrado tener de sobra en competiciones más exigentes que el Europeo.