Hoy día, es frecuente que muchos programas televisivos vegan acompañados de la posibilidad de ganar dinero. Bien el presentador te recuerda a cada momento el número que debes marcar para contestar a una pregunta (de la que, por cierto, él te dice la respuesta), bien aparece un rótulo debajo de la pantalla, que cada dos por tres te anuncia que te queda poco tiempo para hacerte millonario. También los hay, en los que debes llamar para dar tu voto a alguien.

Ni se ha librado de esta práctica el Mundial de fútbol, pues mientras seguías con emoción la retransmisión de los partidos, te perdías parte de la visión, por el dichoso rótulo. Esta estrategia televisiva es bastante discutida, y la realidad es que más de uno se puede dejar parte de su nómina en llamadas de teléfono, dada la asombrosa facilidad con la que puedes hacer fortuna. El caso de los menores es mucho más llamativo. Tanto que se habla de códigos deontológicos, ¿dónde están los de las cadenas televisivas? La Administración Pública también debería intervenir en defensa de los ciudadanos.

J. Javier Avila Martínez **