ECONOMIA

Avanzamos lentamente,pero avanzamos

Antonio Ramírez Guillén

Santa Marta de los Barros

Nuestro país ha conseguido escalar varios puestos en lo que se refiere a las facilidades para hacer negocios respecto a años anteriores. Gracias a una serie de reformas, con las cuales ha conseguido recortar distancias con otros países europeos como Portugal, Francia o Alemania, mucho más eficientes en este aspecto. Así lo reconoce el Banco Mundial en su informe 'Doing Business 2013', que cada año hace una clasificación de 185 países en función de las facilidades que ofrecen a las empresas para hacer negocios.

En este informe, nos damos cuenta de que España se encuentra bastante por debajo, incluso de estados con economías menos avanzadas que la española, como Chipre, Lituania, Macedonia, Georgia o Portugal, que le superan en la clasificación. Estudiándolo más profundamente, podemos observar ranking tan importantes como el de la facilidad para abrir un negocio. Sin embargo, hay que destacar también a países como Italia o incluso Alemania, cuya posición tampoco es muy buena en este aspecto. En cuanto a la obtención de crédito, hemos conseguido llegar al nivel de países como Francia, superando a Portugal en este aspecto, aunque bastante lejos de grandes potencias europeas como Alemania.

En lo que sí ha mejorado España es en el pago de impuestos y en la resolución de insolvencias (superando a potencias mundiales). Por otro lado, el comercio transfronterizo, cuyas mejoras han sido posible gracias a la introducción de las declaraciones electrónicas de aduanas, que permiten realizar las importaciones con más rapidez. Ante la complicada situación en la cual nos encontramos, son necesarios cambios que permitan emprender un negocio con mayor facilidad y en el menor tiempo posible, facilitando el acceso a todos los recursos disponibles.

PENSIONES

Sin memoria

***José Enrique Centén Martín

Las pensiones son el gran problema económico y caballo de batalla de este Gobierno, que desea eliminarlas mientras recorta las actuales, sube el IRPF y las medicinas, quita prestaciones sociales y obliga a pagar el transporte en ambulancia para revisiones, entre otras medidas. Se olvida de que los pensionistas fueron la base del crecimiento del país durante la posguerra. Con el tiempo se dio una mayor estabilidad económica al sistema de la Seguridad Social y se hizo justicia con todos aquellos niños que trabajaron cerca de 40 años sin protección de ningún tipo. Fueron ellos quienes levantaron el país, los que emigraron y mandaron dinero. Cuando llegó su turno ofrecieron a sus hijos lo que ellos nunca tuvieron, creando otra generación en muchos casos egoísta, consentida, celosa de su intimidad e individualista. Mientras, la casta política mantenía sus privilegios casi medievales, dilapidando con sus corruptelas la caja de la Seguridad Social que tanto sacrificio costó llenar, a su vez esos llamados políticos tienen asegurada su pensión con siete años de ejercicio parlamentario. Y, mientras tanto, muchos jubilados ahora deben mantener a sus hijos y nietos parados, con una jubilación cada vez más escasa lograda con años de entrega y sacrificios.