Antonio Jiménez (Radio Nacional) estaba preocupado porque en España "los precios de frutas y hortalizas han subido un 50% en un año". Como el Servicio de la Competencia ya investiga si las grandes superficies pactan los precios aprovechando la falta de competencia, Jiménez se preguntó si esa actuación sería positiva. Pilar Cernuda añadió perplejidad: "¿Cómo es posible que se pueda comprar el tomate español más barato fuera de España que en España?". Explicó Casimiro García Abadillo: "En los precios influyen los elementos climatológicos, pero hay otros que no tienen nada que ver. Cuando las grandes superficies empezaron a crecer, muchos fabricantes se vieron sometidos a presiones para que bajaran sus precios si querían vender en los híper. Hubo competencia entre fabricantes, pero como ahora las grandes superficies ya dominan el comercio, pueden fijar los precios". ¿Del tomate o de todo lo demás?

Profundizó Román Cendoya: "Antes las cosechas eran naturales y se quedaban en el mercado más próximo. Ahora son cultivos hidropónicos, bajo plásticos, que hacen que sea una industria que sabe lo que produce en cada momento sin depender del clima. Así puede regular los precios". Y respondió a Cernuda: "Holanda era el principal productor europeo de tomates. Mientras aquí el sol es gratis, allí necesitan 17 litros de fuel al año para producir un kilo de tomates. Eso encarece el producto, pero como estamos en la UE, los precios se han globalizado con referencia al más alto". ¡Bien! La culpa del precio del tomate también es de Bruselas.