Terminada la decimotercera edición del Womad, las espadas continúan en alto en lo que se refiere a la continuidad o no del festival interétnico en Cáceres. En estos días y pese a los miles de watios de sonido, el silencio se ha impuesto entre organizadores y patrocinadores a la hora de hablar sobre el futuro. Ahora se abre el análisis, aunque el parte meteorológico lo ha vaticinado estos días: se avecinan nublados y tormentas.