El Torneo del Toro de la Vega, que data del siglo XIV, fue declarado fiesta de interés turístico de España por resolución de la Secretaría de Estado de Turismo el 18 de enero de 1980, según consta en la web del Ayuntamiento de Tordesillas, localidad castellana donde ha tenido lugar esta celebración anual. No es por tanto una actividad ilegal, aunque sí concitadora de gran polémica, incluida la crítica generada contra ella entre los profesionales del toreo. El argumento que une a los contrarios a este torneo, punto central de las fiestas de la localidad, es el hecho de que la tradición no puede justificar la barbarie. Una vez más la España anclada en las tradiciones, medievales muchas de ellas, digiere con dificultad el avance de la sociedad hacia el rechazo de celebraciones públicas violentas o hacia la concienciación sobre los derechos de los animales. Así que la tradición deja de ser un argumento de peso en el mantenimiento de los eventos que chocan con las nuevas costumbres.