WEw l último Consejo de Gobierno de la Universidad de Extremadura ha aprobado una batería de medidas para orientar el trabajo universitario hacia la actividad investigadora. El vicerrector de este área, Juan Manuel Sánchez de Guzmán, ha manifestado que junto a la contratación de personal cuyo único trabajo será el de investigar, --el objetivo es crear a escala de la universidad extremeña una especie de Consejo Superior de Investigaciones Científicas con jóvenes investigadores en cuya capacidad futura se confía--, la Uex se propone aumentar el peso de la investigación entre las tareas de sus profesores. Y ello "para hacer frente a una situación de una universidad con menos alumnos y con profesores cuya actividad docente tiende a disminuir", señala el vicerrector.

Esta decisión, aunque en ningún caso suponga un giro, sino una corrección suave de rumbo, es acertada. La Uex, como el resto de universidades españolas --según concluye el ´Atlas Digital de la España Universitaria, un detallado estudio del que se ha hecho amplio eco este periódico-- sufre un desajuste entre el número de titulaciones ofertadas y la demanda. Así, hay carreras en que la matrícula de primer año no llega a una decena de alumnos. Si a ello le sumamos que las perspectivas futuras aventuran una pérdida importante de alumnado en el conjunto de la institución universitaria, y que la futura implantación del Espacio Universitario Europeo obliga a racionalizar la oferta y la demanda, la Uex tiene que hacer frente a esos retos. Las medidas adoptadas en el último Consejo de Gobierno van, pues, en la buena dirección.