Si el vídeo de las Juventudes Socialistas podríamos calificarlo de broma de gusto discutible, el vídeo del señor Rajoy es sencillamente patético. El señor Rajoy está tan ansioso por gobernar que no ha dudado en usurpar al presidente del Gobierno el papel institucional que sólo a él corresponde.
El señor Rajoy ha encontrado necesario, este año, exaltar el fervor patrio con arengas alusivas a la Fiesta Nacional y a los símbolos de España, animando a los ciudadanos a expresar con algún gesto lo que guardan en su corazón, por razones, dice él, que todo el mundo conoce. Sin embargo, yo no sé a qué razones se refiere, aunque sí conozco las razones por las que ha hecho el vídeo, y no son otras que oportunismo político, magnificar problemas, manipular, desestabilizar y avivar las pasiones en beneficio propio.
Al señor Rajoy y a su partido hay que reconocerle la constancia, tenacidad y empeño en esta legislatura para buscar de forma obsesiva todo tipo de estrategias para desgastar y derrotar al presidente Zapatero.
Lástima que con cada idea que llevan a la práctica terminen perjudicándose a sí mismos. Y es que el Partido Popular no para de hacer méritos para volver a perder las próximas elecciones.
Pedro Serrano Martínez **
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