E spaña vive en este momento dos desafíos destacados, con permiso de las pensiones y del campo. Uno se llama coronavirus y el otro, Cataluña. Por mucho que el doctor Fernando Simón o el periodista Lorenzo Milá transmitan, que lo transmiten, sensatez, serenidad y cordura, y por mucho que la mayoría de personas inteligentes consideren una exageración rayana en la demencia la psicosis y el desabastecimiento de mascarillas, sabemos que esta no es una enfermedad gravepero tampoco banal y también que morirán españoles por su causa, y aunque no debería haber muertos de primera y de segunda, la realidad de la muerte cercana provoca repelúsy consuela poco que la gripe también mate. Los expertos aconsejan a la población que no entre en pánico pero poco ayuda que las bolsas de todo el mundo sean pasto de él, por mucho que se insista en que el dinero es muy miedoso.

Tampoco ayuda el aluvión de consejos contradictorios o de prácticas descoordinadas que contemplamos y los protocolos diversos en diversos lugares. Que si en algunos aeropuertos toman la temperatura, pero en otros no, que si las mascarillas sirven solo para que uno no transmita el virus, pero no protegen de él. Por no hablar de los mensajes de procedencia ignota, como que beba uno agua caliente-¡agua caliente!-o que el calor de 27 grados acaba con el bicho.

Por mucho que se diga que no hay desigualdad entre regiones, en el trato regio otorgado por Sánchez al Govern capitaneado por un inhabilitado y entre los que se encuentra un imputado, hay un privilegio tal que todos los demás territorios de España, ni rebeldes ni desobedientes, deberíamos exigir que recibieran a nuestros gobernantes con semejante parafernalia y boato. Así que yo exijo que a Vara, honrado y sumiso a carta cabal, se le pasee por los jardincillospalaciegos y mil cámaras lo capten y que al menos tenga tres horas para desgranar agravios del gobierno central, desde don Pelayo al AVE. Y que hagan lo mismo cada mes todo ello con séquito y cronistas. Claro que a mí nadie me va a hacer caso. No voy a declararme independiente.

* Profesora