La Feria de la Tapa de Plasencia llega a su octava edición, manteniendo el formato de años anteriores: una fecha (entre el 20 y el 23 de octubre) para degustar las tapas en la zona centro y otra (entre el 27 y el 30 de octubre) para hacer lo propio en establecimientos de la zona extramuros. La concejala de Turismo, Elisa Cruz Parejo, alabó ayer los beneficios de esta convocatoria que tiene como propósito difundir y promocionar la variada gastronomía que ofertan los bares y cafeterías de la ciudad, en forma de tapa o aperitivo, "y dinamizar así la actividad hostelera" con la llegada del otoño, argumentó la edil delegada.

Este año se han introducido cambios por parte del gobierno popular: disminuir de seis a cuatro las categorías a concurso y eliminar el jurado profesional, dejando únicamente la votación la popular como medio para designar a las tapas ganadoras. Las categorías de esta edición son: mejor tapa, tapa más vanguardista, tapa más popular y tapa con producto de temporada. Las papeletas con los votos podrán depositarse en la oficina de turismo y en cada uno de los locales participantes, para poder optar al sorteo de premios.

Este año, los hosteleros no estarán obligados por las bases del certamen a mantener las tapas que resulten premiadas.