El abandono de perros en verano ha vuelto a aumentar. Si entre julio y agosto del año pasado la perrera municipal recogió solamente cuatro, este año la cifra se ha multiplicado por cinco y han sido veinte los perros que han tenido que pasar el verano en la perrera abandonados por sus dueños. Son los datos que maneja Luciano Gutiérrez, uno de los dos trabajadores de la perrera municipal.

Sin embargo, el dato positivo es que también se han elevado las adopciones porque este verano han sido 16 mientras que en las mismas fechas del año pasado hubo 14. Pero además, estas 16, tienen una gran importancia porque en dos meses y medio se han adoptado más perros que entre enero y julio de este año, donde sólo se adoptaron 14.

En lo que respecta a los abandonos, aunque este verano han subido, la cifra es inferior a la media de los últimos años, donde el número llegaba hasta el medio centenar. Sobre las adopciones, cualquier persona que desee una nueva mascota puede entrar en la página web del ayuntamiento y allí se muestran diferentes perros, sin embargo no es muy fiable porque no se actualiza desde hace un año, y algunos perros puede que ya ni siquiera estén allí, así que lo mejor es desplazarse directamente a la perrera municipal.

OBRAS DE MEJORA Con todo, si en julio había 78 perros en la perrera, actualmente son 60, 16 más que en la misma época que en el 2004. Esta tarea de recogida de perros y adopciones destaca la labor de los responsables de la perrera y de la Asociación Protectora de Animales y Plantas, siempre pendientes de que los perros abandonados por sus dueños no deambulen por las calles de la ciudad.

Por otro lado, en la perrera municipal se está pendiente de la construcción de un nuevo pabellón. Este se sumará a los ocho ya existentes y todavía se desconoce si será abierto, como los demás, o cerrado. Aunque se habló del mes de agosto como fecha de inicio de las obras, Gutiérrez explicó que "todavía no se han puesto en contacto con nosotros y no sabemos cuando empezará su construcción".