El gobierno del PSOE sacó ayer adelante en pleno su propuesta de subir a la vez todas las tasas e impuestos un 3,1% (el IPC) con la bendición de la edil Victoria Domínguez, que se abstuvo en la votación. No lo hicieron sus excompañeros del PP, que votaron en contra como el CCPL y Josefa Pérez Camisón.

El PSOE contó con la ventaja añadida de la ausencia del edil del PP Anselmo Díaz Cabello --que no pudo asistir al pleno por encontrarse en la asamblea regional-- con lo que el gobierno no habría necesitado el voto de Domínguez porque habría podido utilizar el de calidad de la alcaldesa, pero la exedil popular no se opuso a la subida de tasas, aunque no explicó el motivo en el pleno, que también aprobó la ordenanza antivandalismo.

Quien defendió la medida fue el portavoz del PSOE, Pablo Sánchez del Mazo, con el argumento de que "es la subida que el ayuntamiento necesita en estos momentos para cubrir los servicios que prestamos porque algunos son deficitarios". Aún así, a la crítica de la oposición de que suban todos, sólo dijo "¿y por qué no?" y negó que perjudique a las rentas más bajas porque "pagará más el que tenga un coche más caro, una casa más cara o consuma más agua".

EL IBI SUBE UN 5,2% Ante esto, David Moreno, concejal del PP, insistió en que se trata de una subida "lineal y regresiva para el ciudadano porque no es lo mismo subir el agua o la basura, que pagamos todos, al impuesto de construcción". Mientras, Félix Macías, portavoz del CCPL, criticó que subir todas las tasas a la vez es "un trabajo de diez segundos" y defendió la postura de la oposición de no subirlas todas con el ejemplo del IBI: "El gobierno central lo sube un 2% cada año, con lo que la subida aquí será de casi un 5,2%".