Para evitar el disgusto de ser víctima de un robo en el interior del vehículo, el comisario provincial recomienda, sobre todo, no dejar pertenencias en el interior de los coches, aunque estén aparcados en el interior de garajes, aparentemente seguros.

El segundo consejo es observar las puertas de los garajes, prestar más atención y no marcharse o entrar en el garaje sin comprobar antes que la puerta ha quedado perfectamente cerrada. Esto es principalmente lo que aprovechan los amigos de lo ajeno para colarse en su interior y desde ahí, esperar a que no haya movimiento para cometer los robos.

Para los que, sin embargo, hayan sufrido algún robo de este tipo en garajes, Luis Ochagavía aconseja cambiar el código de los mandos a distancia porque precisamente este es otro modus operandi de los ladrones, aprovecharse de mandos a distancia sustraídos para volver a entrar en los garajes y continuar con los robos. "Nadie piensa que van a volver a entrar en el mismo garaje, pero lo hacen, por eso es recomendable cambiar los códigos, aunque será más fácil para una comunidad con pocos vecinos que para una con muchos, pero es necesario".

Aún así, Ochagavía insiste en que "debemos ser más cuidadosos y cuidar más nuestras pertenencias porque estamos en una región donde la gente sigue dejando el coche abierto y objetos a la vista".