Los alumnos del taller de forja de la comunidad, con su monitor Roberto Iglesias a la cabeza, están construyendo una escultura que refleja el ciclo de la vida de un toxicómano y tienen previsto instalar en La Isla en la primera quincena de mayo. Se trata de cuatro figuras en una realizadas en hierro y de seis metros de alto, que irán sobre una peana de piedra. La primera muestra a un hombre sentado en actitud deprimida (en la foto), que después aparecerá arrodillado, junto a una escalera y finalmente de pie.