El parque de La Isla de Plasencia sigue siendo el principal refugio de la ciudad contra las altas temperaturas durante el periodo estival. Rozando el fin de la temporada, el espacio sigue acogiendo bañistas a diario y es que, las altas temperaturas se resisten a desaparecer.

El canal, que está habilitado desde mediados del mes de junio, se encuentra, para la mayoría de los entrevistados, en "buen estado". Un nivel que no alcanzan, opinan muchos, el césped, la arboleda y las zonas comunes distribuidas por el parque que, según algunos usuarios, no se respetan lo suficiente.

"El agua está muy limpia, sin embargo, la gente no respeta el entorno y todos los días dejan colillas, latas o envoltorios de papel albal en el suelo", explica una usuaria.

"Cuando vuelves con la toalla a casa, va directamente a la lavadora, no la puedes usar al día siguiente, como cuando vas al río, porque en muchas zonas la tierra está muy levantada por culpa de los topos, y todos los años ocurre lo mismo"

A las críticas de algunos usuarios, y de algunos partidos políticos, María Serrano, una jubilada que va a la Isla cada tarde con sus tres nietos, asegura que "de algo tienen que hablar, el caso es quejarse, si está sucio porque está sucio, y si está limpio no lo van a decir. Aunque la verdad es que los árboles son un estorbo, solo atraen bichos y en cuanto hace un poco de aire se caen todas las ramas al suelo".

Por otro lado, hay quien elogia el parque y considera que la Isla está mejor que otros años. "El césped está mejor que otros veranos, menos revuelto, más verde y el parque en general, está muy limpio", se apunta.

Y también los hay que, fieles a rutina y a su ciudad, no cambian la Isla por nada. "La gente se va los fines de semana a las gargantas, aquí se está mejor y no tengo que moverme de casa. Para mi mejor, que la gente se vaya, me gusta coger un libro, tumbarme a leer y quedarme en la sombra hasta que se empieza a ir el personal, cuando para el griterío de los niños, es el mejor momento de la tarde", se indica.

En cuanto a los servicios públicos todos insisten en que sería necesario más limpieza, al igual que la instalación de más papeleras. "Los servicios, aunque no están del todo sucios, suelen estar encharcados, y se convierten en una pista de patinaje. Las papeleras siempre están rebosando y hay basura por todos lados, pero eso es problema de la gente", subraya otro usuario.

Cada bañista parece tener una versión distinta sobre el estado del recinto. Sin embargo, todos coinciden en que la Isla es el mejor destino de baño en la ciudad. "Nunca me han gustado las piscinas públicas, no soporto el cloro en los ojos, a veces se pasan y para los niños el canal es mejor. Si se aburren tienen más sitio para enredar o jugar, en la piscina suelen ser más estrictos y encima no dejan jugar a los niños con balones ni entrar nada al agua, aquí se divierten más. Les traes al parque y sabes que vas a echar aquí todo el día".

Con respecto al canal, el ayuntamiento informó a principios de la temporada de que se sigue el sistema del año pasado, con controles, en semanas alternas, del ayuntamiento y del Servicio Extremeño de Salud, a los que, según informó el consistorio, se suma una limpieza con vaciado del canal cada quince días.