Ibéricos, torta del Casar, miel de encina... Estos fueron algunos de los productos de origen extremeño que cocineros y alumnos de la escuela municipal de cocina fusionaron durante el día de ayer en sus instalaciones.

Los aprendices pudieron disfrutar de una jornada de convivencia con ocho profesionales de la Asociación de Cocineros y Reposteros de Extremadura, Acocirex. Los cocineros, de Badajoz, Cáceres, Mérida y la zona norte, aconsejaron a los aspirantes sobre sus salidas profesionales y trabajaron en equipo en la creación de menús.

Los invitados trabajan como cocineros o jefes de cocina en emblemáticos restaurantes de Cáceres, la Vera, y Berzocana, en pleno centro del geoparque Villuercas-Jara. Casi todos, en especial, Víctor Encinar, del restaurante cacereño Cayena, apuesta por "extremeñizar" todos sus platos y así lo aconsejó.

"La idea a la hora de escoger un producto es aprovechar la despensa extremeña, que es una de las mejores de España", dijo.

Antigua alumna

Por su parte, Azuzena de Matías es una antigua alumna de la escuela que trabaja en el restaurante Puerto del Emperador de Aldeanueva de la Vera y, ayer, regresó a la escuela, para hablar a las nuevas generaciones sobre la importancia de trabajar en equipo. David Moreno también trabaja como cocinero en el noreste de la provincia. Es el jefe de cocina del Hotel rural Villa Xarahiz, de Jaraíz de la Vera.

Jesús Alberto Durán y Juan Miguel Palacios, de los restaurante cacereños Alma del Sabor y Eustaquio Blanco, respectivamente, quisieron acercar su cocina a la escuela. Palacios eligió una receta del siglo XVI, con cordero como ingrediente principal, para impresionar a los alumnos.

Y el sabor dulce del día lo puso Pedro Galán, del restaurante El Brezo Rojo, de Berzocana, quien además de preparar un menú principal, se ocupó del postre junto a los alumnos de segundo año.

Ante este despliegue gastronómico, el alcalde Fernando Pizarro alabó la labor de la escuela municipal, de su director y profesores, y de todos los alumnos.