Son alrededor de 520 los mayores de 65 años que reciben ayuda a domicilio, pero todavía hay 150 que están en lista de espera. Son datos de la concejalía de Bienestar Social del ayuntamiento, que se encarga de seleccionar quiénes tienen derecho a ser ayudados en las tareas de aseo personal y del hogar o ser acompañados al médico.

La concesión de esta ayuda depende de si viven solos, si se valen por sí mismos y de sus ingresos económicos a grandes rasgos. Este servicio que presta la Junta para mayores válidos es cada vez más demandado ante la falta de plazas en residencias, tanto públicas como privadas. De las primeras en Plasencia sólo existe San Francisco y de las segundas el asilo y el Hogar de Nazaret.

Aunque la Junta se resiste a dar a conocer la lista de espera en San Francisco, familiares interesados en lograr una plaza aseguran que llega casi a las 200 personas mientras el centro tiene espacio para 110. Datos municipales reflejan que son cerca de 5.000 los vecinos de Plasencia mayores de 65 años y el Plan Estratégico de la ciudad ya contemplaba la creación de un geriátrico entre sus proyectos dada la demanda creciente, pero de ello nada más se ha sabido. Como tampoco de al menos dos proyectos de residencias privadas que no pasaron de la declaración de interés social de la Junta porque siguen paralizados.