El ayuntamiento ha decidido acondicionar los soportales de la plaza tras el Martes Mayor, una obra prevista dentro del proyecto de remodelación de la zona a propósito de la nueva iluminación y que el anterior equipo de gobierno dejó sin hacer.

Las obras comenzarán un día después de la fiesta, según comunicó la concejala de Cultura a los hosteleros de la plaza en una reunión mantenida la pasada semana. Contemplan la limpieza y posterior pintado de los techos y paredes que se encuentren deteriorados en parte por la instalación de los nuevos focos así como cubrir los cables para reducir el impacto estético y el peligro de averías que producen.

ELIMINAR UNA FILA DE MESAS

Los hosteleros de la plaza esperan que el período de obras no afecte al habitual funcionamiento de los establecimientos, incluyendo las terrazas. "Como mucho, nos han dicho que deberemos quitar una fila de mesas durante las obras, a fin de que los operarios puedan instalar los andamios sin estorbo. En cualquier caso, nosotros cooperaremos sin problema porque va en nuestro beneficio", asegura uno de los propietarios de bar con terraza.

Aún así, advirtieron de que las obras deberán acometerse con rapidez, puesto que la plaza debería estar en perfectas condiciones, incluyendo la zona de bares y las terrazas, para el último fin de semana de agosto, fecha en la que tendrá lugar una nueva edición del Festival Folk.