La misa de este mediodía en la catedral tendrá dos momentos tradicionales de la Navidad. Uno será la bendición de las figuras de nacimientos particulares que lleven los niños que lo deseen y el otro, la entrega de la llamada luz de la paz de Belén.

Esta es una tradición iniciada hace varios años por el movimiento scout católico de la ciudad. Sus miembros reparten paz con el símbolo de la luz. Según ha explicado el Obispado, cada año, un niño del norte de Austria recoge la luz de la gruta en la que nació Jesús en Belén y la lleva a la catedral de Viena, desde donde se distribuye. Los scouts de Plasencia acuden posteriormente a la delegación de Salamanca, donde reciben la luz y la trasladan hasta la catedral placentina.