La alcaldesa no tardó ayer en pedir disculpas por lo ocurrido en el pleno del lunes, en el que usó el término ladrón para dirigirse al portavoz del PP y este grupo municipal abandonó el salón plenario. Elia Blanco dijo lamentar "los tonos" del pleno y entonó el mea culpa al tiempo que llamó a todos los partidos a mantener la calma. Por su parte, el presidente regional del PP, José Antonio Monago, instó ayer al secretario regional del PSOE y presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, a "poner orden" en el gobierno local porque "no es de recibo una alcaldesa que increpa a la oposición".

La actitud de la alcaldesa, que interrumpió al portavoz popular, Miguel Cantero, para acusarle de "echar peroratas"; la posterior interrupción de Blas Raimundo; el uso por ambos partidos del término ladrón ; la actitud de Enrique Tornero, que siguió a Cantero para preguntarle en tono amenazante si él era un ladrón, seguido después por Carmen Blázquez y Blas Raimundo con intención de detenerle...

Fue lo que ocurrió el lunes en el pleno y que la alcaldesa dijo ayer lamentar "profundamente" y esperar que no se repita. Como explicación, Blanco subrayó que resulta muy difícil mantener la calma "cuando te sientes herido profundamente", en alusión a la denuncia por presunta corrupción de concejales del PSOE presentada por el PP y que el juzgado investiga ahora.

"Creo que todos debemos hacer un esfuerzo, y yo entono el mea culpa, porque la administración municipal, el pleno, y todos los que tenemos la responsabilidad, unos en el gobierno y otros en la oposición, seamos capaces de darle a la ciudad lo que la ciudad merece. Con esta idea espero seguir trabajando, cómo no, con el compromiso que tenemos", dijo la alcaldesa.

Por su parte, el presidente regional del PP, José Antonio Monago, aprovechó ayer para referirse a lo ocurrido en el pleno y subrayó que Fernández Vara tiene la obligación de "poner orden" en el equipo de gobierno local porque "los placentinos no se merecen este espectáculo, una alcaldesa que provoca y un concejal socialista que sale detrás de un concejal del PP", informó Efe.

"Esas no son las formas de la vida política de ninguna ciudad ni ningún pueblo extremeño", aseveró el líder de los populares, para quien estos comportamientos no contribuyen a dignificar la vida política, sino más bien "a que se vea a los políticos como el problema de los ciudadanos".

Por contra, alabó el comportamiento "ejemplar" de los concejales del PP porque, "a pesar de la provocación, no entraron en la provocación y se mantuvieron serenos", afirmó.