Los vecinos que viven en calles privadas de uso público no tendrán que seguir pagando la iluminación, el alcantarillado o el asfaltado de sus calles. Porque la alcaldesa garantizó ayer que estas calles pasarán a ser públicas y por tanto el mantenimiento correrá a cargo del ayuntamiento, dentro del nuevo Plan General de Ordenación Urbana.

Elia Blanco ratificó así el compromiso de su gobierno de que la revisión del PGOU supondrá la desaparición de esta figura urbanística denominada entidad de conservación que, según explicó ayer un administrador de estas entidades, Martín Carlos García, "de toda Extremadura, solo se da en Plasencia y así me lo ha confirmado el propio consejero de Fomento".

En la ciudad hay en torno a una veintena de estas entidades, entre ellas las urbanizaciones Jardines del Jerte I y II, a cuyos responsables vecinales la alcaldesa garantizó que el nuevo PGOU resolverá sus problemas.

Es lo que estaban deseando oír porque hace ya más de un año que la Concejalía de Urbanismo puso en marcha los trámites para que estas calles pasen a ser públicas. Entonces, en una reunión en Las Claras, Victoria Domínguez explicó que los afectados debían solicitar por escrito en el ayuntamiento el cambio y así lo hicieron Jardines del Jerte I y II, pero "hasta ayer no habíamos vuelto a saber nada de si seguía en pie el compromiso porque no habíamos podido hablar con la alcaldesa".

Sigue en pie, como subrayó Blanco, aunque también aclaró que "hay distintas tipologías porque hay calles muy privadas y se está estudiando si todas podrán pasar a ser públicas con el nuevo plan", aunque no especificó cuáles estarían fuera de esta adaptación.

Lo que sí hizo la alcaldesa fue criticar que se permitieran en su día estas entidades y culpó directamente a los gobiernos del PP. "Lo ideal es que quien dio el permiso para hacer estas viviendas le hubiera explicado a los vecinos su tipología y que el mantenimiento iba a correr por su cuenta. No se pueden hacer casas sin advertir primero lo que hay", dijo y afirmó además por contra que, desde que gobierna, no ha dado el visto bueno a ninguna promoción que incluyera esta figura urbanística.